Con los años nuestra sociedad se ha desarrollado y nuestra alimentación ha ido cambiado. Pasamos de comer “lo que nos daba la tierra” a ingerir altas cantidades de alimentos procesados: hamburguesas, patatas fritas, bollería, zumos de tetrabick, chocolate que tienen todo menos cacao, mucho azúcar refinado, muchas calorías y pocos nutrientes.

Este cambio radical de alimentación ha hecho que nuestro organismo desarrolle diversos tipos de enfermedades íntimamente relacionadas con la forma como comemos. Y fue debido a todo esto que nació la “dieta paleo”. Como su nombre indica su propuesta está basada en recuperar la “alimentación de antes”. Alimentos que se encuentren en le medio natural y que no estén procesados. ¿Y qué era lo que comían nuestros antepasados?  Frutas, verduras, raíces y tubérculos, frutos secos y aceites vegetales. Entre los alimentos de origen animal están las carnes magras, los huevos y los pescados.

La consultora gastronómica Joana Moura explica que descubrió esta dieta hace 5 años cuando después de su embarazo quiso cuidar más la alimentación y quiso entender más cómo funciona nuestro organismo. Llegó así a la dieta paleo, un régimen alimentar adaptado a nuestra genética: “Está basado en alimentos frescos, de temporada, dando preferencia a los alimentos biológicos, proteínas de animales de pasto y la pesca sostenible. Se trata de un régimen alimentar dónde no entran los alimentos procesados y que nos nutre profundamente, proporcionando la regularización intestinal, la absorción máxima de nutrientes que nos proporciona de forma natural una vida más sana y nos ayuda a conseguir nuestro peso ideal”.

La dieta paleo es una dieta rica en proteínas y grasas, y baja en carbohidratos. Y estas son algunas de sus ventajas:

• Ayuda a mantenerte sano y lleno de vitalidad
• No se cuentan calorías ni se pesan los alimentos. Dentro de las pautas de la dieta se puede comer sin restricciones
• Esta dieta ayuda a luchar contra las enfermedades causadas por nuestra alimentación actual como la obesidad, el cáncer, la diabetes, las enfermedades del corazón, la enfermedad de Parkinson, el Alzheimer, depresión, infertilidad, patologías que generan enfermedades  autoinmunes y otras condiciones como el acné, intolerancias alimenticias, o inflamaciones
• No contiene gluten, así que es apta para celíacos.
• Disminuye el apetito y acelera el metabolismo
• Se reduce el  colesterol malo y triglicéridos en sangre, y aumenta el colesterol bueno.
• Previene el estreñimiento.

Sin embargo, hay algunos cuidados a tener en cuenta. Lo importante de esta dieta (y de cualquier régimen alimentar que llevemos) es la necesidad de planificar bien la alimentación y organizarse. Entre las principales críticas a esta dieta está el exceso de proteínas: La dieta paleo puede llegar a ser una dieta hiper proteíca y hay que tener cuidado con las consecuencias que esto puede tener en nuestro cuerpo (en especial en el riñón). Es común también la falta de algunas vitaminas como la Vitamina D

Y es aquí dónde los superalimentos juegan un papel fundamental: sea para aumentar nuestra sensación de saciedad, para darnos más vitalidad o para ayudarnos a suplir algún déficit que nos puede traer la dieta.

Estos son los superalimentos que debemos tener en nuestra despensa si hacemos la dieta paleo:

1-Matcha – Estos polvos verdes son el aliado perfecto para todos aquellos que quieran perder peso ya que acelera nuestro metabolismo. Tiene 70 veces más antioxidantes que un zumo de naranja y 9 veces más betacarotenos que la espinaca.  Es además un buen energizante. Al contrario del café, con el te Matcha conseguirás una energía que se dura durante mucho tiempo.

2-Omega 3 – Una de las características de esta dieta es el alto consumo de ácidos grasos. Una buena parte de los alimentos que ingerimos en la dieta paleo (como semillas, nueces, huevos, etc) tienen una cantidad elevada de Omega 6 pero muchas veces no conseguimos consumir todo el Omega 3 que nuestro cuerpo necesita (es importante para el organismo mantener un equilibrio entre ambos). Si en nuestro día a día no consumimos muchos alimentos con las famosas “grasas saludables” la chía cumple la función de completar la dosis que nos falta. Estas semillas contienen una gran cantidad de Omega 3, potasio e hierro. Regula los niveles de azúcar en la sangre y ayuda en la pérdida de peso. En Iswari tienes la opción de adquirir las Semillas Chía o el Mix Omega 3 que hemos creado para los que necesitan una dosis extra de ácidos grasos.

3- Cacao – Es uno de los indispensables de las dietas paleo. El cacao crudo trae muchos beneficios a la salud: es antioxidante, mejora el flujo sanguíneo y continúe el llamado “neutransmisor de la felicidad”. Además su sabor a chocolate y es perfecto para usar en postres sanos como las trufas saludables o los helados y batidos caseros. Puedes consumirlo en polvo o en pepitas.

La consultora gastronómica Joana Moura propone un plan detox de 30 días para conseguir llevar una vida paleo: “Después de los 30 días nos sentimos tan bien y conocemos cuáles son los alimentos que no nos hacen bien y que deterioran nuestra salud”. Moura asegura que después de esos 30 días muchos son los que se sienten tan a gusto que deciden cambiar para siempre de alimentación. ¿Te animas?